septiembre 2013 ~ Hunklopedia

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lunes, 30 de septiembre de 2013

Un día en mi vida

El despertador suena como cada mañana.
De un salto me levanto de la cama, sin apenas tiempo para prepararme.
Tras desayunar y recoger mis cosas salgo a la calle.
Giro la esquina y camino hasta el bus.

Está hasta arriba de gente, como de costumbre.
Cierro los ojos, como cada vez que viajo,
esperando los 40 minutos muertos que me separan de mi destino.
Al llegar bajo a la calle de nuevo y vuelvo a caminar, sin apenas darme cuenta de por donde voy.

La puerta de la oficina está desierta a estas horas, tal y como me gusta.
Abro la puerta, tarde, como siempre, todos están ahí, y entre el gentío estas tú.
Te saludo y me siento en mi sitio a trabajar, como los últimos 5 años.

Las horas pasan lentas en este pequeño espacio, y más cuando estas cerca.
Consigo verte cuando levanto la vista de la mesa, pero sé que tú no me ves.
Puedo sentirte cuando pasas a mi lado, pero sé que tú no me sientes.

Hablamos un poco a la hora del café, palabras sin sentido salen de tu boca,
las únicas que pronuncias cuando estoy cerca.
Poco después vas al baño y, como siempre, voy contigo.
Mientras meamos me imagino que te poseo, que te amo y te beso contra la pared de azulejos.
Al acabar me excuso un momento mientras tú te vas, para apagar la pasión que se enciende en mí cada día desde que te conozco.

A la hora de salir nos despedimos hasta el día siguiente, un adiós breve y amigable, pero no el que espero.
Vuelvo a deshacer el camino y me quito la corbata y desabrocho la camisa mientras ando.
Los zapatos me rompen los pies con cada paso y el peso de la americana aumenta a medida que avanzo.
El bus me espera donde siempre, llevándome de vuelta a casa.

Dejo la americana y la corbata en la percha del armario al llegar y me preparo para comer.
El sabor no es el mismo cuando tú no estás cerca.
Al lavarme los dientes me miro en el espejo, el dormir poco me vuelve a pasar factura.
Ojalá estuvieras mirando al espejo a mi lado.
Me tumbó en el sofá a descansar de otro largo día de trabajo.
Parece que te siento junto a mí.

Cuando el sol empieza a ponerse voy al gimnasio. Las pesas y las máquinas no paran de sonar.
A veces cruzo miradas con alguno de los presentes, a veces se convierte en algo más que una mirada.
Pocas veces acabamos desnudos en la cama.
Mientras recorro su cuerpo con mis manos y entro en él imagino que te beso a ti y que es en ti en quien entro.

Termino la jornada de ejercicio golpeando el saco de boxeo con mis manos, sólo, sin nadie más cerca.
Aprendí por las malas que en esta vida hay que luchar, pero hay batallas que no se pueden ganar.
Tras ducharme vuelvo de nuevo a casa, a terminar otro día.

Las últimas horas del día se consumen mientras me desnudo y entro en la cama, demasiado grande para mí.
Como cada noche miro a mi izquierda, no estás a mi lado.
Cierro los ojos para que esta agonía acabe por un par de horas. Cierro los ojos para olvidar...

Hasta que sueño contigo.


The alarm clock rings like every morning.
I get up of bed quickly, without any time to prepare myself.
After eating breakfast and packing my stuff I leave home.
I turn the corner and I walk to the bus.

It’s crowded, as always.
I close my eyes, like every time I travel,
Waiting for 40 dead minutes that separate me from my goal.
When I arrive I walk into the streets again, without noticing where I am going.

The office’s door is desert in the morning, just as I like it.
I open the door, late, as always, everyone is there, so as you are, into the crowd.
I say hello and I take my seat in order to start working, like the past 5 years.

The time runs slowly in this tiny room, more when you are near.
I can see you when I look up from my table, but I know that you can’t see me.
I can feel you when you pass by my side, but I know that you can’t feel me.

We chat a little in the coffee break; meaningless words come out of your mouth,
The only ones you say when I’m near.
Then you go to the toilet and, as always, y go with you.
While we pee I imagine that I make love to you, that I fuck you and kiss you throw the wall.
When we finish I take a moment for me while you’re going, in order to calm the passion I feel since the day I met you.

When the work is over we say goodbye till the next day, a short and friendly farewell, but not which I expect.
I walk back to the bus stop and I put off the tie and unbutton my shirt while I’m walking.
My shoes are breaking my feet and the weight of my coat grows with each step I take.
The bus is waiting for me in the same place, bringing me back home.

I hang the coat and the tie in the wardrobe when I get home and I prepare lunch.
The taste of this food isn’t the same if you’re not close.
When I brush my teeth I look myself into the mirror, the lack of sleep is hitting me hard.
I wish you were here looking yourself into the mirror by my side.
I lay in the couch to rest from other long day at work.
I feel you by my side.

When the sun is hiding I go to the gym. The weights and the machines are making noise as always.
Sometimes I cross a glance with some of the people of the gym, sometimes it becomes in something more than a glance.
Just a few times we end naked in my bed.
While I touch his body with my hands and I fuck and kiss him I imagine that I’m fucking and kissing you.

I end my training hitting the punching bag with my fists, alone.
I learnt in a bad way that, in this life, you have to fight but there are battles that you cannot win.
After taking a shower I return to my home, another day ends.

I spent the last hours of the day taking off my clothes and going to bed, it’s too big for me.
Like every night I look to my left, you’re not by my side.
I close my eyes so this agony ends, just for a few hours. I close my eyes to forget…

Till I dream of you again.

domingo, 22 de septiembre de 2013

Sunday's Star (31): Zachary Quinto & Chris Pine

Iepa!

Como llevo mucho tiempo sin postear el Sunday's Star voy a hacer sesión doble este domingo. Espero que os gusten:

Chris Pine (left) and Zachary Quinto (right)

Zachary John Quinto (2 de junio de 1977, Pittsburgh, Pensilvania), 36 años, es un actor estadounidense. Es más conocido por sus papeles en la duodécima entrega de la saga Star Trek (interpretando el papel del Sr. Spock) y en Héroes (interpretando a Gabriel "Sylar" Gray).

Es mitad italiano y mitad irlandés. Comenzó su carrera en la televisión, participando en algunas series como CSI, Embrujadas, A dos metros bajo tierra, interpretando papeles secundarios. También participó en algunos episodios de American Horror Story. En mayo de 2012 terminó el rodaje de la secuela de Star Trek protagonizada por él.

Es un notable defensor de los derechos LGTB, ha participado en proyectos como It Gets Better (un canal de vídeo en línea en defensa de una serie de adolescentes acosados en EEUU por su homosexualidad, con el objetivo de prevenir el suicidio entre jóvenes LGTB). Además se declaró públicamente Gay en su blog en 2011, tras el suicidio del adolescente James Rodemeyer, acosado por su orientación sexual y tras la aprobación del matrimonio igualitario en Nueva York. El 13 de Septiembre de 2012 confirmó que está manteniendo una relación con el actor de Glee Jonathan Groff (relación que acabó en julio de 2013).










Christopher Whitelaw Pine (26 de agosto de 1980, Los Ángeles, California), 33 años, es un actor estadounidense conocido por interpretar a James T. Kirk en la saga Star Trek y Star Trek: en la oscuridad.

Chris empezó en el teatro desde la adolescencia. Su salto a la televisión fue en el año 2003 en la serie de televisión ER y en CSI. Miami. Su papel más notable fue en The princess diaries 2: Royal engagement, hasta que en 2010 protagonizó junto a Denzel Washington Unstoppable (Imparable).

Desde 2012 a 2013 tenía una relación con el modelo Dominique Piek. Además ha sido portada de la conocida revista LGTB "Out Magazine" (la cual, por cierto, tengo en mi casita jejejeje).









Hi!

It has been a long time since I last posted the Sunday's Star so this week I'll do a "double session" with Zachary Quinto and Chris Pine, hope you like it!

Zachary John Quinto (born June 2, 1977 in Pittsburgh, Pennsylvania), 36 years old, is an american actor. He's best known for his role in the 12th Star Trek movie, playing Mr. Spock, and in its 2013 sequel, Star Trek Into Darkness.

He's half italian and half irish. He started his career in TV, appearing as a guest star on shows including CSI, Charmed, Six Feet Under and L.A. Dragnet. He also appeared in several American Horror Story chapters.

Zachary publicly came out as gay in October 2011 after the suicide of bisexual teenager Jamey Rodemeyer, he said that he realized "that living a gay life without publicly acknowledging it is simply not enough to make any significant contribution to the inmense work that lies ahead on the road to complete equality". In 2010 he contributed a video to the "It Gets Better Project", an internet-based campaign that aims to prevent suicide among LGBT youth. In September 2012 he confirmed that he was in a relationship with Jonathan Groff (which ended in 2013).

Christopher Whitelaw Pine (born in August 26 in Los Angeles, California), 33 years old, is an american actor. He's best known for his role as James T. Kirk in the 2009 Star Trek movie and in its sequel, Star Trek Into Darkness in 2013.

Chris started doing theather since his childhood. His jump to TV was in 2003 in the ER TV show. He's first lead role was in 2010, when he starred Unstoppable with Denzel Washington. From mid 2012 to April 2013 he was in a relationship with model Dominique Piek. He has also appeared in a well known LGBT magazine "Out" (which I have in my home, btw).

martes, 17 de septiembre de 2013

Novedades en la organización

Aupa!

Entre ayer y hoy me he dedicado a hacer algunos cambios en el blog, lo primero de todo ha sido la gestión del equipo de la Hunklopedia (que tengo un lío de cuentas de correo que no os lo podéis imaginar). Lo segundo ha sido abrir una cuenta de tumblr para el blog, que la podéis visitar siguiendo el siguiente link:

http://hunklopedia.tumblr.com/

O haciendo clic en las fotos de la derecha del blog (por ahí hay una foto maravillosa que tiene estampado el link del tumblr). He hecho básicamente la cuenta para poder subir las fotos que acompañan a los relatos y tener una especie de "base de datos" de hunks, además de para poner un poco de porno, que, por cierto, me encanta (y aquí no me gusta ponerlo).

Aparte de esto comentaros que he quedado finalista en un concurso de relatos de temática LGTB organizado por la web kedacon (http://kedacon.com/) , un portal bastante interesante, por cierto. Os agradecería mucho que me votarais en dicho certamen, aquí abajo os dejo el link:

http://kedacon.com/a-los-diecisiete/

Por lo demás este fin de semana espero comenzar con una campaña de intercambio de links para promocionar un poco el blog, tendrá alguna que otra sorpresa, ya lo veréis.

Un saludete y hasta la próxima entrada!


lunes, 16 de septiembre de 2013

Sexopedia - Capítulo 2 - ¡A follar! (+18)


En el capítulo anterior hablábamos sobre cómo prepararse para follar, en éste capítulo  la meteremos  nos meteremos de lleno en el asunto.

En general es importante tener en cuenta que practicamos sexo porque nos gusta, etc etc. No me voy a poner en plan "Papá Hunk" diciéndoos lo que todos sabéis, pero para disfrutar del buen sexo es mejor (en mi humilde opinión) hacerlo con una persona en la que confiéis y con la que estáis a gusto. Lo que no quiere decir que no vayáis a disfrutar follando con el tío que os acaba de meter la lengua hasta la tráquea en la discoteca en vuestra noche de juerga.

Para disfrutar al máximo podemos dividir este pequeño "tutorial" en tres partes: La preparación, las posturas y las cosas a tener en cuenta.

- Preparación (En-acto-sepsual):

La preparación es vital, como contaba en el capítulo anterior, para disfrutar. Depende mucho de la persona, hay quien a la hora de recibir un rabo abre más el culo, otros menos, otros nada... en general siempre es conveniente preparar la zona antes de follar, ya sea con los plugs, los dedos... o la lengua de nuestro amante / novio / ligue / rollo / profesor de análisis químico uy que errata!. En fin. Esto es, un buen beso negro.
Lo que hacemos con esta práctica (de la lengua) es abrir y lubricar el ano (importante la higiene y la confianza en la otra persona, ya sabéis que culito limpio, culito feliz).
Tanto esto como el uso de los plugs puede ser una actividad preliminar, imaginación al poder.

- Las posturas:

Chicos, hay que ser realistas, el sexo anal duele al principio, esto es así por mucho lubricante y por mucho cuento chino que nos hayan metido en la cabeza, pero hay posturas en las que duele más y otras en las que duele menos que te la metan.

Aquí os voy a aconsejar una progresión de posturas para pasarlo bien como mejor se: Con Hunks (aviso, pueden aparecer rabos!):


La mejor manera de empezar a follar suele ser así, porque tu controlas lo que te la metes, según va haciendo hueco el rabo puedes darle más ritmo al asunto, aquí a gusto de cada uno. Se puede hacer lo mismo pero en vez de mirar pa nuestro Hunk empotrador mirando hacia el otro lado.



Otra buena manera de continuar es la que os pongo aquí (así o más suave, depende de cada uno, que los chavales del porno vienen muy revolucionados y como bien sabéis la vida no es una peli porno). De lado también es una buena opción, porque se controla bien cuánto y cómo se mete.

Luego ya nos podemos ir más a lo complicado, a las posturas que, por lo general, suelen doler:



Y tal que así, luego todo es experimentar en esta vida y encontrar la postura que mejor le venga a cada uno (la diferencia de altura, aunque os digan lo contrario, hace mucho).

- Cosas a tener en cuenta:

Hay que decir que el estado anímico de una persona es importante a la hora de follar, si estamos nerviosos el ano se contrae instintivamente y es complicado de abrir, con lo que mejor es estar "relajaitos". Lo que nos lleva a la siguiente regla:

"Los nervios son malos"

Tened en cuenta que vais a disfrutar más cuando más relajados esteis y, por norma general, se os abrirá más el culo y mejor cuanto más os ponga la persona en cuestión.

Otra cosa de la que hay que hablar es del tamaño. Sí, caballeros, el tamaño importa. No es lo mismo, ni por asomo, que te metan un rabo estándar (15-16 cm) y de ancho normal, a un POLLÓN (sí, con mayúsculas) largo y ancho (o no tan largo pero ancho). Existe una cosa que se viene a llamar "umbral de dolor", unos tenemos mucho umbral, otros menos, pero el caso es que cuando una polla es más grande que el hueco a rellenar... mal asunto. La clave para lidiar con este asunto es la preparación, como siempre, y hacerse al rabo de nuestra pareja. Lo que nos lleva a la última regla:

"El tamaño importa"

También influye la resistencia de la persona. Tener el rabo dentro al final nos irrita y cansa, la práctica hace al maestro así que cuanto más practiquéis antes pasareis de pasivos a pasivazos.

Aparte de esto poco más puedo contar. En las siguientes entradas de la Sexopedia exploraremos diferentes prácticas sepsuales (fisting, BDSM, algún que otro fetiche...). Si alguno o alguna (que sé que hay chicas que leen el blog...) desea colaborar estoy abierto de piernas a la colaboración, hacérmelo saber en los comentarios.

Hasta el próximo post! Sed malos!

sábado, 14 de septiembre de 2013

Una noche en la cárcel

La noche había caído hace tiempo en las afueras de la ciudad. Un grupo de amigos bebía tranquilamente en la calle, como cada sábado por la noche. Aquel lugar cercano al río era su punto de reunión habitual, perfecto para pasarlo bien sin molestar a nadie. Las risas y las nuevas historias que compartían entre ellos eran constantes, fruto, algunas de ellas, de la desinhibición provocada por la cerveza. Entre ellos se encontraba Jake, sentado, hablando tranquilamente, bebiendo, como siempre. Entre sorbo y sorbo relataba con todo lujo de detalles su último ligue. Había sido algo fugaz, como todos los que caían entre sus manos, no lo había vuelto a ver después de tirárselo.

Era un tío joven, de 28 años. Pelo corto con una pequeña cresta, algún que otro piercing en las orejas y ceja, alto y algo delgado. No tenía mayores preocupaciones en la vida que follar y beber de vez en cuando.
Tras un largo rato charlando Jake sintió la necesidad de evacuar toda la cerveza. Se excusó un momento y se alejó del grupo hacia uno de los callejones cercanos. Mientras entraba en aquél callejón observó el coche patrulla que llevaba aparcado ahí toda la tarde, no parecía haber nadie dentro, con lo que se adentró y se bajó los pantalones para mear.



Se agarró el rabo con la mano mientras un vigoroso chorro salía de él, suspiró y echó la cabeza hacia atrás mientras meaba, sin percatarse de la presencia de alguien que lo observaba desde hacía rato. De repente escuchó un ruido y se giró para ver que había ahí, mientras todavía seguía meando. Un policía apareció tras de él, iba vestido con el uniforme típico, la prieta camisa de aquél uniforme parecía apretarle bastante el pecho trabajado y los hombros anchos. Era más alto que él y llevaba barba de tres días, el vello abundante en los brazos le daba un aspecto temible y masculino, las botas largas y negras que llevaban culminaron con la obra maestra del morbo que era aquél agente de la ley.

El agente le dijo que estaba prohibido mear en la calle, Jake seguía a lo suyo, evadiendo las frases con su típico sarcasmo pasota y rebelde. Llegó un momento que amenazó con multarlo si no se iba de ahí, Jake pasó completamente de él. El agente agarró su hombro con la mano para pedirle que se subiera los pantalones y se largara, pero Jake no quería ceder y, tratando de zafarse se dio la vuelta y meo sobre las botas del agente, por accidente.

Tras soltar un largo suspiro aquél policía, dos cabezas más alto que él, lo empotró contra la pared y lo esposó, diciéndole que quedaba detenido. Después lo empujo para que andara hacia el coche patrulla, todavía con los pantalones bajados, en cuanto vio que Jake tropezó y cayo al suelo lo cogió y lo puso sobre su hombro. Aunque trató de zafarse de él otra vez fue inútil, aquél agente lo transportaba con una facilidad insultante. Lo metió en la parte atrás del coche patrulla y arrancó, camino a la comisaría.
A pesar de los gritos de Jake al son de "brutalidad policial" y "maldito madero" el agente no se inmutaba, siguió conduciendo en la oscuridad.



En cuanto llegaron a la comisaría el agente metió el coche en el garaje. Tras aparcar sacó a Jake del mismo y lo llevó a una especie de calabozo. Lo sentó en una silla en el centro de la sala frente a una mesa y lo esposó a esta. Acto seguido abandonó la estancia. Jake aprovechó para subirse los pantalones y observar aquella habitación: estaba cerrada por unos barrotes de hierro con una pequeña puerta en un lateral, una pequeña ventana detrás de él, también cerrada con barrotes daba al exterior. A través de la puerta por la que habían entrado ahí podía observar que no había nadie al otro lado, parecían estar solos ahí.

Tras un largo rato el agente apareció y se sentó a su lado, dejando sobre la mesa una carpeta con papeles. De su cintura colgaba algo que parecía una cuerda, pero no le prestó atención. Le dijo algo sobre que estaba acusado de desobediencia, pero Jake pasó de escucharlo. Cuando el aquél policía agarró la barbilla de Jake para que le prestara atención éste le escupió a la cara. El agente soltó otro suspiro mientras se quitaba la saliva de la cara.

- Es hora de que alguien te enseñe modales - dijo mientras se levantaba de la silla.

Entonces cogió a Jake de la cabeza y lo empotró sobre la mesa, le soltó las esposas y, mientras agarraba con una sola mano sus muñecas sacó una cuerda y le ató las manos a la espalda. Acto seguido se sacó una pelota de goma atada a una mordaza y se le puso en la boca para que se callara. Poco después, con otra cuerda, le ató las piernas a las patas de la mesa, dejándolo completamente inmóvil, tras empujarlo de nuevo contra la mesa cortó con una tijera sus pantalones vaqueros y su ropa interior, dejándolo con el culo al aire.



En ese momento comenzó a azotar sus nalgas con la mano, con fuerza, de vez en cuando lo agarraba del pelo y le gritaba al oído que era un cerdo y que necesitaba aprender por las malas. Por alguna razón Jake había dejado de sentir el dolor de los azotes después de un rato, en vez de quejarse comenzó a gemir cada vez que aquél policía lo azotaba, su rabo comenzó a crecer bajo la mesa. En cuanto se dio cuenta el agente lo levantó de la mesa y lo acercó hacia sí:

- ¿Te estas poniendo cachondo, eh? - dijo mientras agarraba su rabo - Eres un cerdo granuja, a ver si te gusta esto.

Comenzó a estrujar sus pequeños pezones y a morder su cuello. El rabo de Jake estaba cada vez más duro. Sus manos, atadas a su espalda estaban tan cerca de la entrepierna del agente que pudo comprobar que él también la tenía dura:

- ¿Quieres mi rabo? - le dijo al oido.

Jake asintió. Entonces el agente soltó sus pezones y lo volvió a empotrar contra la mesa. Se arrodilló y comenzó a lamer el ano de Jake con fuerza. Escupía de vez en cuando sobre su agujero y introducía su lengua en él, haciéndolo gemir de placer. Tras un rato se deshizo de su camisa, dejando a la vista un pecho cubierto de vello y cogió la porra de su cinturón. Tras untarla de saliva comenzó a pasarla por el ano dilatado de Jake hasta que finalmente lo penetró con ella.



Poco después la sacó de su culo y salió de la habitación, volvió al rato con preservativos y un bote de lubricante. Se abrió la bragueta del pantalón y se sacó el rabo, tras ponerse el condón y untarlo en lubricante comenzó a follarse a Jake. Primero despacio hasta que entró en él, después con fuerza, empujándola hasta el fondo. Ambos gemían de placer mientras lo hacían. Cuando llegó el momento de descargar el agente salió de su interior y después de quitarse el condón se corrió sobre su espalda, después masturbó a Jake hasta que hizo lo propio sobre la mesa del calabozo.

Ambos jadeaban después del esfuerzo. Con algo de esfuerzo el agente cortó las cuerdas que ataban sus piernas a las patas de la mesa y lo tumbó sobre el suelo, después se agarró el rabo y meó sobre Jake. Su orina cayó sobre su piel, impregnándolo por completo, un morbo que jamás había experimentado.

- Te perdono la multa - dijo el agente mientras escurría las últimas gotas - Espero que te lo pienses la próxima vez.

Jake asintió en el suelo. El agente le ayudó a levantarse y lo liberó de sus ataduras, le sacó la pelota de la boca y lo llevó hasta el vestuario de la comisaría. Ahí le dijo que se duchara. Cuando Jake salió de la ducha encontró ropa limpia para cambiarse sobre uno de los bancos, se vistió y abandonó aquella comisaría en la oscuridad. Todo un mundo nuevo se abrió ante él a partir de aquél momento.

lunes, 9 de septiembre de 2013

Sexopedia: Capítulo 1 - Prepárate para la guerra


La preparación es vital para disfrutar de un buen revolcón. Esta preparación la podemos dividir en varias partes. Para que sea más sencillo dividiré la explicación en la parte “Pre-acto-sepsual” (antes del acto) y “En-acto-sepsual” (durante el acto).


- Pre-acto-sepsual:


Antes de iniciar el acto. Es importante tener en cuenta que los hombres somos más simples que un botijo, sólo tenemos un agujero por el que meterla (exceptuando la boca, obviamente) y tiene un inconveniente bastante evidente: por ahí hacemos de vientre.

Afortunadamente existen maneras de convivir con nuestro agujero y prepararlo para disfrutar al máximo. Respecto a la preparación del ano hay tres puntos importantes: La dieta, la limpieza y la dilatación


- La dieta:


La dieta es muy importante ya que de ella depende la frecuencia con la que vamos al baño. Es muy importante hacer de vientre de 2 a 3 horas (aproximadamente, como tiempo ideal) antes de una penetración anal. Esto nos puede evitar más de un problema (que analizaremos en la etapa de “En-acto-sepsual”. Para lograr esto lo mejor es llevar una dieta alta en fibra así tendremos una regularidad suficiente como para follar sin problemas, aunque cada persona es un mundo. Otro consejo que os doy desde aquí es el de comer arroz el día antes de follar, parece una tontería pero funciona y, además, reduce el “miedo” que tenemos a hacernos de vientre mientras nos la meten (como sabéis el arroz es astringente, con lo que ayuda a evitar problemillas).

Otra manera de “vaciar el depósito” por decirlo de alguna manera es el uso de enemas o lavativas, que nos aseguran al 100% que vamos a vaciar todo el contenido de nuestros queridos intestinos. Se pueden adquirir en las farmacias sin que nos miren raro por pedirlas, aseguraos de seguir las instrucciones del prospecto a la hora de utilizarlas.


- La limpieza:


Después de ir al baño la limpieza es vital, por la propia salud del que recibe como por la de la persona que te la mete. Esto nos lleva a la siguiente regla:

“Culito limpio, culito feliz”

A nadie le gusta sacar el condón sucio del culo o los malos olores; hay que procurar tener el ano limpio. Para mantener limpio el ano tenemos varios métodos: El videt (eso que hay al lado de la taza del WC que no tenemos ni zorra idea de para qué sirve es un instrumento maravilloso para limpiarse el culete) y la ducha anal.

El primer método es de limpieza superficial, lo llenamos más o menos hasta la mitad de agua templada y nos sentamos encima. Con la mano cogemos agua del fondo y lavamos el ano, después con un poquito de jabón (si es de pastilla mejor, pero hacedme el favor de hacer espuma en la mano, no frotarlo directamente en el culo, por dios) lavamos la zona, después introducimos el dedo en el ano y lavamos hasta donde alcancemos. Es una manera rápida y eficaz de lavar la zona.

El segundo método lo podemos hacer mientras nos duchamos. Con una pera de goma (previamente desinfectada, que no queremos disgustos) cogemos agua templada y la metemos en el culo suavemente apretando la pera. El truco es aguantar la mayor cantidad de agua que se pueda y luego apretar el culo (en el WC) para sacarla (como si fuéramos a hacer de vientre). Se continúa hasta que el agua que sale salga limpia. 



Otra manera es con una manguera especial de la ducha. Se quita la alcachofa de la ducha y se coloca ahí, se da el agua de la ducha y se pone tiesa cual rabo. La metemos en el culo y dejamos que haga su trabajo. Cuando nos sintamos “llenitos” hacemos lo mismo que en el caso anterior.



Es importante que si hacemos la ducha anal hay que esperar antes de follar, porque las mucosas del ano se tienen que regenerar. Si follamos en este estado nos vamos a irritar el ano muy rápido y seguro que salimos con más de una herida (y las fisuras anales, amigos, duelen y mucho).


- La dilatación:


Por último, después de hacer todo lo anterior, tenemos la dilatación. El ano no se dilata solo, si no lo dilatamos es muy poco probable que el rabo de nuestro amiguete de esta noche entre, y si entra corremos el riesgo de hacernos bastante daño y no disfrutar como dios manda. Lo que nos lleva a la siguiente regla:

“Si no dilatas esto no funciona”

Esto se puede hacer tanto antes como durante el acto, pero es importante hacerlo. Existen varias formas de hacerlo: Con las manitas o con ayuda de un plug. 

Si queremos dilatar con la mano lo que tenemos que hacer primero es lavarla bien y cortarnos las uñas (lógico, ¿no?), después nos tumbamos tranquilamente en la cama y nos ponemso un poco de lubricante en el ano, masajeamos un poco la zona para ir calentando y luego untamos el dedo anular con lubricante y lo metemos en el culo poco a poco. Una vez dentro puede que sintáis ganas cagar, es normal, la sensación desaparece con la práctica. 

A partir de aquí vamos haciendo círculos con el dedo para masajear las paredes del ano por dentro, y ya que estáis podéis aprovechar para encontrar vuestra próstata (generalmente es al fondo y pa’ arriba, pero cada culo es un mundo), si la tenéis dura mientras dilatáis la podéis diferenciar al tocar una especie de bulto duro y redondo, al tocarla da mucho gustirrinin, por algo es el punto G masculino (aprovechad para haceros la paja de vuestra vida).

Si queréis seguir más id metiendo más dedos, siempre usando lubricante. Con dos dedos suele ser suficiente, si os caben tres o cuatro perfecto, si os caben los cinco consideraos una máquina.

La segunda manera de dilatar es usando un plug anal. En los sexshop los venden de muchos tamaños y colorines, pero lo mejor es que os hagáis con un pak de 3 plugs de tres tamaños (pequeño, mediano y grande), sale bueno, bonito y barato. 



Usarlos no tiene mayor misterio, se untan de lubricante y se meten en el culo, siempre con paciencia, estando relajados. 

Estos juguetitos hay que meterlos hasta el fondo (tienen un tope, así que no os preocupéis por si se os vayan a quedar atrapados en el culo). Una vez en el fondo podéis dejarlos ahí un rato para que hagan su trabajo o pasar al siguiente tamaño. Normalmente con el mediano es con el que se trabaja mejor, si os ponéis una rutina diaria usando el mediano todos los días no tendréis problemas para meteros un rabo de tamaño estándar, además contribuís a ejercitar la musculatura de vuestra pared anal, con lo que se consigue más placer en la penetración.

Acordaos de lavar con agua y jabón los plugs después de usarlos, para secarlos lo mejor es dejarlos secar al aire. Existen productos especialmente diseñados para lavar los juguetes, no está de más cuidarlos un poco.

De cualquiera de las dos formas tenemos que tener en cuenta que hay que usar un buen lubricante para facilitar el paso de lo que nos vayamos a meter por el culo, lo que nos lleva a la siguiente regla:

“Si no lubricas esto no funciona”

Hay dos tipos diferentes de lubricantes: Los de base acuosa y los de base de silicona. Los primeros son más baratos y se adaptan a cualquier situación (para usar con juguetes, masturbarse, dilatar…), además son fáciles de quitarse de encima. La principal pega que tienen es que se secan bastante rápido, con lo que hay que usar más cantidad.

El segundo tipo, los de silicona, son más caros pero su acción dura bastante más, con un par de gotas tienes suficiente para dilatar tranquilamente, o para echar un buen kiki (porque no se secan por mucho que pase el tiempo). La pega que tienen es que son difíciles de quitar de la piel y del ano, hay que lavarse bien después de usarlos (con jabón). Para quitarlos del interior del ano lo mejor es ir al baño. Yo uso éste y la verdad es que me va muy bien, totalmente recomendado. Otra pega es que manchan bastante, como se os caiga en las sábanas ya las podéis limpiar un par de veces porque la mancha cuesta quitarla (¡Cuidado, las mamás están al acecho!).

En el siguiente capítulo nos metemos en materia, nunca mejor dicho, analizando una serie de técnicas para follar decentemente.

Hasta el siguiente capítulo me despido, espero que os haya gustado y ayudado ésta entrada.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Un Encuentro Inesperado

No había ninguna luz encendida en la calle bien pasada la medianoche. Las calles estaban vacías desde hacía tiempo y sólo una brisa helada ocupaba los caminos por los que, hacía sólo unas horas, habían pasado cientos de estudiantes dirigiéndose a una fiesta. Dos de ellos, pareja desde hacía tiempo, habían preferido aprovechar una de las pocas ocasiones que tenían su piso vacío en vez de unirse al gentío.

Aquel piso era un ir y venir continuo de gente, todos sus ocupantes estudiaban la misma carrera, con lo que se conocían bien y eran buenos amigos. Jake vivía ahí desde hacía 2 años, desde entonces no le había quitado el ojo de encima a uno de sus compañeros de piso, Mike, con el que compartía habitación. Pelo corto, algo bajito y rostro redondeado; a pesar de su estatura tenía un cuerpo de infarto, fruto de su afición (casi obsesiva) por el deporte.  A pesar de sentir un gran deseo por él, no parecía que sintiera la misma atracción, y si lo hacía, no lo demostraba.


Jake conoció a su pareja, Alan, hacía más de medio año. Fue un flechazo y no tardaron mucho en formalizar su situación, pues ambos estaban acostumbrados a conocer a mucha gente sólo por diversión. Las noches que pasaban juntos en aquél piso eran intensas, lo suficiente como para olvidarse de todo lo demás. Alan había conocido también a todos los compañeros de Jake, y Mike le resulto el más atractivo con diferencia. A veces bromeaba sobre el hecho de que un día podría convencerlo para que se acostara con los dos, de que se uniera a la fiesta. Todo quedó en una broma, hasta aquella noche.

Aquella noche iban a estar solos, como de costumbre. Habían estado follando desde después de la cena, Jake estaba tumbado sobre la cama mientras Alan estaba sobre su ingle con las rodillas apoyadas en el colchón. El rabo erecto de Jake se deslizaba por el ano dilatado de Alan a buen ritmo, haciendo que ambos disfrutaran al máximo el uno del otro. Poco después Jake empujó con su mano el pecho de Alan, para que cayera de espaldas sobre la cama, poco después Jake estaba de rodillas, follándolo con más fuerza mientras sostenía los pies de Alan con las manos.

De repente se escuchó un ruido en la calle, pero ninguno de los dos le dio importancia. Unos instantes después Mike abrió la puerta del dormitorio. Fue un instante de sorpresa para todos, ninguno se movió un centímetro de donde estaban por el susto. Mike desprendía un tremendo olor a alcohol, estaba sonrojado y costaba imaginar que todavía se mantuviese de pie. Alan, ante la incómoda situación que tenían delante, no pudo evitar decir lo que llevaba tanto tiempo queriendo decir: “Bueno, qué, ¿te unes a la fiesta?”.


Mike se quedó mirándolos a los dos, un pequeño bulto se hacía notar en su entrepierna, tal vez fuera efecto del alcohol, pero estaba cachondo, y la pareja se dejó llevar por el momento. Jake salió del interior de Alan, y le tendió la mano a Mike, éste la cogió y se dejó caer en la cama entre los dos. Ambos empezaron a desnudarlo poco a poco, primero le quitaron el pesado jersey que llevaba y finalmente la camiseta, tenía un cuerpo muy bonito. Los dos le besaron el cuello a la vez y acariciaron su pecho con las manos, después Alan lo besó en la boca en un beso que, aunque ambos trataran de negarlo, habían esperado mucho tiempo. Jake lo besó también en cuanto tuvo la ocasión, haciendo realidad su fantasía.


Mike parecía disfrutar del encuentro fortuito que habían tenido en su habitación. La tensión en sus pantalones aumentaba a medida que su compañero de habitación y su novio lo besaban y acariciaban. Se desprendió del resto de su ropa, quedando totalmente desnudo a merced de aquella pareja con la que nunca pensó que haría nada. No era muy consciente de lo que estaba pasando, pero se dejó llevar.

Alan comenzó a chupar el miembro de Mike mientras Jake se puso detrás de él, besando su cuello y acariciando su pecho con las dos manos, de vez en cuando pellizcaba sus pezones, los leves gemidos que soltaba parecían indicar que era algo que le gustaba de verdad. Mike estaba disfrutando como nunca imaginó que disfrutaría con dos hombres.

Poco después Jake empujó la cabeza de Mike hacia el rabo de Alan, dudó al principio, pero luego comenzó a lamerlo. Alan agarró su cabeza con las manos para guiarlo mientras Jake lamía el ano de Mike. Una vez que tuvo el culo preparado Jake se cambió de condón y comenzó a follarlo, muy despacio al principio, pues supuso que nunca lo había hecho.


Mike se quejaba al principio, pero después de acostumbrarse parecía disfrutar. Los tres estaban en éxtasis. Jake continuó empujando su rabo por el culo de Mike mientras Alan disfrutaba de su boca en su rabo. Tras un rato ninguno de los tres podía más, había llegado el momento de descargar. Alan se puso entre los dos para recibir la leche de ambos, segundos después tres generosos chorros de lefa cubrieron su cara y pecho.

Los tres soltaron un largo suspiro y se besaron de nuevo entre ellos, había sido toda una experiencia que esperaban repetir algún día.

lunes, 2 de septiembre de 2013

Sexopedia: Introducción - La vida no es una película Porno


Los dos estaban tranquilamente tumbados en el sofá, el uno se apoyó sobre el pecho del otro mientras veían aquella película. Se besaron primero despacio y luego más fuerte, pronto la película dejó de importarles, la acción de verdad estaba ante sus ojos. Se desprendieron de la ropa que llevaban y comenzaron a rodar su propia película”.


¿No os ha pasado alguna vez? Así comienza todo, amigos. Cuando la cosa se calienta hacemos de todo: que si te chupo un pezón, que si bajo más hacia tu entrepierna, te la chupo… pasamos a la cama… y follamos como locos.

Esto es lo que pasa normalmente en todos los encuentros entre dos tíos, sobre todo en el porno gay. Vemos constantemente a chulazos follar como auténticas máquinas: Activos destrozando culos, pasivos recibiendo dos pollas en su culo a la vez, versátiles en medio haciendo el trenecito… y nosotros, ilusos, pensamos que podemos hacer lo mismo. Pero no amigos, la vida no es tan fácil, y menos en este aspecto tan íntimo.
En esta nueva sección de la Hunklopedia os enseñaré una serie de reglas y consejos que os ayudarán a preparar, explorar y mejorar vuestra experiencia sexual, orientado a las relaciones chico-chico, lo siento señoritas, sois todo un misterio para mí:

“La vida no es una película porno”
“Si no preparas, no disfrutas”
“Culito limpio, culito feliz”
“Si no dilatas esto no funciona”
“Si no lubricas esto no funciona”
“Los nervios son malos”
“El tamaño importa”

La primera de todas las reglas, y la más importante, es la siguiente:

“La vida no es una película porno”

Efectivamente, caballeros. Todos hemos intentado imitar a nuestros ídolos del porno (en el caso de la gente a la que le guste, este es un país libre) y muchos nos hemos dado cuenta de la primera regla por las malas.

Ejemplo: Intento metérsela a mi ligue de una noche y no hay manera de que entre a pesar de tenerla como una piedra.

La primera cosa que se nos viene a la cabeza es “¡Pero si en el vídeo que vi se la mete a la primera!” ó “Esto en el porno no pasa”. Craso error. Detrás de todos esos vídeos que tanto nos ponen hay una preparación impresionante por parte de los participantes (sobre todo los pasivos) y otros trucos algo más cuestionables de los que os hablaré más adelante. La primera regla se confirma, la vida no es una peli porno y nunca lo será (salvo que seas una máquina y encuentres a un compañero que también lo sea, ahí lo dejo).

La preparación es una etapa muy importante a realizar antes del acto sepsual (sí, sepsual, que sexual queda muy formal), sobre todo por parte de quien va a recibir el rabo del otro. Esto nos lleva a la segunda regla:

“Si no preparas, no disfrutas”

En el siguiente capítulo de la Sexopedia hablaremos de los métodos de preparación antes y durante el acto. Hasta entonces… limitaros a hacer mamadas.

Saludetes y hasta el próximo post.

domingo, 1 de septiembre de 2013

Noticias frescas

Aupa!

Después de este largo y productivo verano vuelvo por fin a casita. He aprovechado estas vacaciones para escribir más relatos (unos guarros, otros no tanto) para el blog, espero publicarlos en los próximos días. Además he estado trabajando en una nueva sección del blog: La Sexopedia, un espacio en el que me centraré en trasmitiros toda la sabiduría ancestral de los Hunks en el arte de acostarse con otro tío.

Durante los próximos días publicaré los primeros capítulos, espero que sean de vuestro agrado. También se aceptan colaboradores para esta sección, a uno siempre se le pasa algo por alto cuando escribe, los consejos son bienvenidos. Podéis usar la sección de comentarios para comunicar cualquier cosa, que para algo está.

Aparte he estado preparando una pequeña campaña para publicitar el Blog, haciendo un intercambio de Links con los demás blogs similares, en breve tendré preparado el post con toda la información (hay que ayudarse los unos a los otros).

Hasta muy pronto!